Un buen concepto es el mejor soporte para la toma de decisiones en un proyecto inmobiliario. ¿Cómo podemos crear conceptos que realmente contribuyan al éxito?
Cuando un concepto inmobiliario está bien estructurado, impacta positivamente desde la concepción del diseño hasta la calidad de vida de sus habitantes. Y no solo eso, además, facilita la toma de decisiones en cada una de las especialidades que intervienen. Todo se torna coherente, y sobre todo real.
Del lado de las inmobiliarias, usualmente los productos son consecuencia de los parámetros normativos de la zona, la optimización de la rentabilidad del desarrollador y algunos atributos aleatorios que elegimos intuitivamente de esta monotonía urbana. Del otro lado tenemos al potencial comprador, quien busca un producto predeterminado básicamente por ubicación, precio y distribución.
Coinciden, pero siempre hay algo especial y éste puede ser nuestro punto de partida para una buena estrategia.
¿Qué puede hacer que un proyecto sea realmente especial?
Buscamos algo particular, único, diferente. Pero en el proceso de decisión de compra inmobiliaria hay un significado del término especial que toma valor: «muy adecuado o propio».
Identificándonos como compradores, observamos que esta sensación surge de algún detalle que nos mueve, nos atrae, nos hace sentir que ese inmueble es para nosotros; incluso en algunos casos, nos hace pagar más de lo calculado, esperar más de lo planificado. Simplemente nos pertenece. Es nuestro.
Cuando tocamos esa fibra en el potencial comprador, nuestro proyecto será el elegido.
¿Cómo surge el concepto?
Las inmobiliarias nos preguntan qué concepto crearemos para una campaña. La respuesta es: Lo descubriremos juntos. Un buen marketing inmobiliario entra a trabajar con el equipo, en la medida de lo posible, desde los primeros trazos. El objetivo es descubrir esos factores que parecen evidentes pero pueden convertirse en puntos clave que nos ayudarán a tomar decisiones a lo largo del proceso.
Nuestra metodología es simple. Primero pensamos en el habitante. Nos inspiramos en sus necesidades y privilegiamos todo aquello que sumará valor. Valor especial.
Luego vamos en sentido inverso, trasladando estas necesidades al equipo. Trabajamos con el desarrollador, el arquitecto, el interiorista, el financiero y por qué no con el estructural, el paisajista, el especialista en iluminación. El concepto debe imprimirse en todo el desarrollo del proyecto. Podemos afectar usos de áreas comunes, acabados, calibración de precios… y en algunos casos hasta el entorno inmediato.
Siempre hay algo de valor especial, tangible o intangible, propio de la filosofía de la marca y del mismo proyecto inmobiliario. Lo curioso es que estos detalles son tan propios y tan diversos, que el proyecto debe apostar por un concepto particular, uno que toque fibras. Lo más importante: que sea genuino, no puede quedar como un ornamento. Así, lo especial va tomando fuerza y se hace más perceptible. Vendemos una realidad.
Preguntas clave para descubrir conceptos:
Un buen concepto parte de una correcta definición del producto y logra que todo el proceso de decisiones fluya naturalmente. La clave está en saber descubrirlo, afinarlo y comunicarlo adecuadamente para llegar estratégicamente a los futuros propietarios.
#conceptoinmobiliario #Marketinginmobiliario #Estrategiainmobiliaria #Insightinmobiliario
CONTACTO
(51) 993 609 822
info@exactoperu.com
Centro Empresarial El Polo II
Avenida El Polo 670 Oficina C 403
Santiago de Surco, Lima.
@ 2023 EXACTO PERÚ Todos los derechos reservados
TRABAJA CON NOSOTROS
Buscamos a los mejores profesionales en
arquitectura, diseño gráfico, marketing y digital
para formar parte de nuestro equipo.
Escríbenos y envía tu CV a:
team@exactoperu.com